4 de diciembre de 2014

Sevilla y la Inmaculada Concepción



Inmaculada Concepción - Sevilla
Inmaculada Concepción - Sevilla
No se puede negar la estrecha vinculación que el sur de España, y especialmente, Sevilla, mantienen con la que es Madre de Dios, no es regalado el título de Mariana que Sevilla porta en su escudo, desarrollando durante el año mil y un actos que dan pruebas de esa veneración que nos hace ser "tierra de María Santísima".

De todos estos actos que a lo largo del año se celebran adquiere especial resonancia aquellos que se realizan en honor de María Inmaculada, actos que durante este fin de semana volverán a repetirse en la Sevilla del siglo XXI, recordando hechos que acontecieron allá por el siglo XVII.

Se cuenta que en 1613. durante la homilía del día de la natividad de la Virgen María, el 8 de septiembre, en el ya desaparecido convento dominico de "Regina Angelorum" se vertieron afirmaciones que ponían en duda que María fue concebida sin pecado original, y eso era algo que la Sevilla del momento no podía tolerar. la "guerra" estaba servida entre los "maculistas" y los "inmaculistas".

Pero vayamos al meollo de la cuestión, sus antecedentes. No existe testimonio evangélico o bíblico de que María fuese concebida sin mácula, es la progresiva divinización de la figura de la Madre de Dios la que promueve esta idea. En el siglo XII se establece la festividad de la Inmaculada el día 8 de diciembre, fecha no arbitraria, un simple calculo cronológico nos sitúa esta fecha como 9 meses antes de la Natividad de María que se celebra el día 8 de Septiembre.

Inmaculada Concepción - Sevilla
Inmaculada Concepción - Sevilla
Santo Tomás de Aquino establece la doctrina "santificatio in utero" , María es librada del pecado original con posterioridad a su concepción, idea que hacen suya los Dominicos.  Los Dominicos hablaban de "sanctificatio" pero no de "conceptio"

Por otro lado Duns Scoto defiende que María es concebida libre de pecado, es decir, desde su concepción esta inmaculada. La orden franciscana defiende esta postura, siendo más adelante apoyada también por los jesuitas.

Durante los siglos XIV y XV se mantiene la discursión y permanece el enfrentamiento entre las Ordenes de Dominicos y Franciscanos sin que el papado se defina al respecto. Si se van definiendo los ámbitos académicos, las Universidades de Colonia, París, Maguncia, Valencia, Granada van proclamando su defensa de la pureza Inmaculada de María, así como el fervor popular que toma partido por la idea Franciscana.

En el Renacimiento se siguen buscando argumentos favorables o desfavorables a esta idea. Lutero tercia en la discusión y hace publica su postura opuesta a la Inmaculada Concepción de María hecho que espolea a los católicos no protestantes y origina que el Concilio de Trento cree, sin base teológica, toda una argumentación favorable.

España, de fuerte tradición católica, defiende la Inmaculada Concepción de María, en casi todas la ciudades de celebra la festividad desde el siglo XIV. Con la llegada de los Reyes Católicos y sus sucesores se refuerza el vínculo entre la población y la Inmaculada, en años en los que todo el mundo miraba a España como el centro de las decisiones políticas del momento, el descubrimiento de América, las riquezas que llegaban a nuestros puertos, las campañas de nuestros ejércitos, hacían de España una de las naciones mas influyentes.

 Monumento Inmaculada - Sevilla
 Monumento Inmaculada - Sevilla

Puestos al día volvemos a principios del siglo XVII, a la predicación del prior del Regina Angelorum aquel 8 de septiembre. El Arzobispo de Sevilla, Don Pedro de Castro ( anterior arzobispo de Granada, donde se habían encontrado unos documentos del siglo I que si hablaban de la concepción pura de María, y que se convirtió en abanderado de la idea ) enarbolo todos los argumentos posibles, entre ellos los documentos granadinos, en contra de la orden dominica.

Don Pedro Castro, con el apoyo de la nobleza sevillana ( la cual se sentía traicionada por los Dominicos al poner en duda su religiosidad y sus creencias, hecho que molestó en demasía a los nobles sevillanos ) y de otras ordenes religiosas ( Franciscanos y Jesuitas sobre todo ) orquestó una campana de desprestigio contra los dominicos, implicando en ella al pueblo y traspasando el "debate"del campo meramente teológico al terreno popular. Sin dudar el pueblo de Sevilla se situó al lado de la corriente inmaculista y se organizaron actos de desagravio, procesiones, novenas, cultos... incluso un concurso de poesía. En este campo adquirió fama D. Miguel Cid, que a instancias de la Hdad del Silencio dedico esta copla a la inmaculada


Aunque no quiera Molina
ni los frailes de Regina,
ni su padre general,
todo el mundo en general
a voces, reina escogida,
diga que sois concebida
sin pecado original.


Monumento Inmaculada - Sevilla
 Monumento Inmaculada - Sevilla
Por parte del arzobispado de Sevilla se envió una comisión, presidida por Vazquez de Leca, a Roma, al objeto de forzar al papado a definir como dogma la Inmaculada Concepción de la Virgen María; pero no es hasta dos años después que desde Roma se envía una bula a Sevilla, no se define el dogma como se pretendía, pero si permite que se sigan celebrando actos en su nombre; respecto a los "maculistas", contrarios al dogma, no se condenan sus ideas pero si se les obliga a no hablar y difundirlas en público. Realmente era un hachazo a la noción que sobre el respecto mantenían los Dominicos, si bien Roma se cuida mucho de desautorizarlos directamente.

Mientras, en el periodo que va desde la embajada a Roma y el escrito de SS Pablo V, Sevilla sigue movilizándose en favor de la Purísima, y así, en 1615 la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, vulgo "El Silencio", en cabildo de oficiales celebrado el 23 de septiembre acuerda " defender el voto de la pureza de María Inmaculada derramando hasta la ultima gota de sangre si ello fuese preciso " siendo la primera institución en el orbe cristiano que así lo hace. A su rebufo van otras hermandades y corporaciones, siendo de destacar la cofradía del Stmo. Cristo de la Fundación y Nuestra Señora de los Ángeles, vulgo "los Negritos" en la cual, su hermano mayor y el alcalde, ambos negros, se venden como esclavos al objeto de que la hermandad disponga de fondos para celebrar una función en honor de la Inmaculada Concepción.

Monumento Inmaculada - Sevilla
 Monumento Inmaculada - Sevilla
Referente a la actitud de la Hermandad de "El Silencio" hay que destacar que, como conmemoración de este hecho, desde principios del siglo XX en el cortejo de la cofradía en la madrugada el Viernes Santo, un nazareno porta un cirio votivo con la imagen de la inmaculada y bajo ella el escudo de la Hermandad, y otro hermano porta una espada, asida por la hoja.

Hay que destacar como el arte, pintura e ingeniería, contribuyeron a la expansión de la pureza inmaculada de María, habiendo dos artífices principales de ello, por un lado Bartolomé Esteban Murillo con su serie de Inmaculadas ( aún cuando el modelo inconográfico no es suyo, quien realmente lo define es Francisco Pacheco, pintor y suegro de Velázquez ) y el imaginero de Alcalá la Real Juan Martínez Montañes. Muchos mas pintaron y tallaron mas adelante a María, Zurbarán, Grosso, 

Ya en el siglo XVII, en 1854, doscientos cuarenta años después de los hechos narrados, el Papa Pio IX proclama el Dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen María en la bula "ineffabilis Deus" con estas palabras:  declaramos, afirmamos y definimos que ha sido revelada por Dios, y de consiguiente, qué debe ser creída firme y constantemente por todos los fieles, la doctrina que sostiene que la santísima Virgen María fue preservada inmune de toda mancha de culpa original, en el primer instante de su concepción, por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Jesucristo, salvador del género humano. Por lo cual, si algunos presumieren sentir en su corazón contra los que Nos hemos definido, que Dios no lo permita, tengan entendido y sepan además que se condenan por su propia sentencia, que han naufragado en la fe, y que se han separado de la unidad de la Iglesia, y que además, si osaren manifestar de palabra o por escrito o de otra cualquiera manera externa lo que sintieren en su corazón, por lo mismo quedan sujetos a las penas establecidas por el derecho. 
Con todo ello Sevilla necesitaba además dejar constancia de su historia y su apoyo incondicional al Dogma, y con ocasión de la Exposición iberoamericana de 1929 se encargo a Juan Talavera Heredia la realización de un monumento que se inaugura el 8 de diciembre de 1918. 

Monumento Inmaculada - Sevilla
 Monumento Inmaculada - Sevilla
Este monumento, visible en la Plaza de la Inmaculada, entre la Catedral, el Alcázar y el Archivo de Indias, está realizado en mármol de Carrara, en la parte superior, sobre dos columnas, una imagen de la Inmaculada para cuyo modelo se usó aquella que Murillo pintase para el Hospital de los Venerables Sacerdotes. En la base, cuadrada, figuran la estatuas, realizadas por Lorenzo Coulleaut, de 4 insignes defensores de la pureza Inmaculada de la Stma Virgen María, el escultor Juan Martínez Montañés, el pintor Bartolomé Esteban Murillo, el poeta Miguel Cid y el jesuita Juan de Pineda. 

Pero como en Sevilla todo es exagerable, los estudiantes comienzan a cantarle salves a la imagen cada 8 de diciembre, hasta nuestros días, en los cuales todas las tunas del distrito universitario de Sevilla, por orden de antiguedad, se dirigen a los pies de María Santísima a cantarle sus mejores canciones y a hacerle ofrendas de flores, acto este que reúne a una gran cantidad de sevillanos y foráneos que quieren así rendir honores a la que, gracias al pueblo de Sevilla, es declarada nacida sin pecado original.





La Inmaculada Concepción en el arte



Inmaculada Alonso Cano
Inmaculada Alonso Cano 

Inmaculada Alonso Cano
Inmaculada Alonso Cano


Inmaculada Juan de Mesa
Inmaculada Juan de Mesa

Inmaculada Martínez Montañés
Inmaculada Martínez Montañés

Inmaculada Murillo
Inmaculada Murillo

Inmaculada Murillo
Inmaculada Murillo

Inmaculada Francisco Pacheco
Inmaculada Francisco Pacheco

Inmaculada Velázquez
Inmaculada Velázquez

Inmaculada Zurbarán
Inmaculada Zurbarán









1 comentario :

  1. Al comienzo de uno de los párrafos se dice: "Ya en el siglo XVII, en 1854..." Apuntar que ese año pertenece al siglo XIX, no al XVII.

    Por otro lado, enhorabuena por el artículo.

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